Cómo llevar el equipaje en la bicicleta.

A la hora de viajar en bicicleta una de las dudas más comunes es cómo llevar el equipaje. Es una decisión que hay que meditar muy bien para poder disfrutar plenamente del cicloturismo. Antes de comprar cualquier cosa es necesario analizar el o los tipos de viajes que se van a hacer: número de días, dónde se va a dormir, si se va a cocinar en hornillo o se va a comer de restaurante… Ojo, esto no quiere decir que las distintas formas de llevar el equipaje solo se puedan usar para un tipo de viaje, pero, por ejemplo, no tiene mucho sentido tener unas alforjas delanteras antes que unas traseras. Las delanteras serán para cuando empecemos a llevar una cantidad de cosas bastante alta.

A continuación, os vamos a enumerar las distintas opciones de carga que tenéis en un viaje en bicicleta, y así podréis hacer las combinaciones que más se acoplen a vuestros gustos. Eso sí, tened en cuenta que, a más espacio, más cosas innecesarias llevaréis y más peso tendréis que mover. No hace falta que en un viaje llevéis todas las opciones al mismo tiempo. ¡Empezamos!

Alforjas traseras:

La opción cicloturista más empleada. Es difícil que te encuentres a alguien viajando en bicicleta y no lleve unas alforjas traseras como mínimo. A partir de ahí, lo normal es ir añadiendo bolsas. Para empezar a matar el gusanillo, unas alforjas baratas te servirán perfectamente. Conforme vayas subiendo el nivel de tus salidas te darás cuenta de que necesitas mejores materiales y la mejora de las alforjas es una de las primeras cosas en las que deberías invertir.

Alforjas delanteras:

Más pequeñas que las traseras y más raras de ver. Lo normal es que la gente use unas alforjas traseras y cargue también material encima del portaequipaje trasero. Si ya has hecho esto y tienes que ampliar capacidad, las alforjas delanteras son una opción muy factible, ya que repartirás mejor el peso en la bici y le dan más estabilidad a la hora de rodar.

Échale un vistazo a nuestro artículo sobre las características de las alforjas de bicicleta para profundizar más.

Bolsa de manillar:

La bolsa de manillar no sirve para llevar una gran cantidad de equipaje, pero sí para llevar las cosas que necesitas más a mano en el día a día como la documentación, el dinero, el teléfono móvil, la cámara de fotos… Lo mejor para una de estas bolsas es que tengan bastantes compartimentos (externos o internos) para llevarlo todo bien organizado y que tengan un sistema de anclaje que te permita extraer la bolsa fácilmente, de manera que cada vez que pares en un sitio a hacer una visita, a comprar algo de comida o a lo que sea, puedas llevártela con todas las cosas importantes que contiene.

Saco estanco:

Para llevar el equipaje encima del portabultos tienes varias opciones, además de la clásica de llevarlo a pelo. La más recomendable es el saco estanco. Se trata de un saco que se usa en muchas modalidades deportivas, casi todas con un componente de agua importante, que en el mundo de los viajes en bicicleta es muy útil por varias razones. Por su forma se puede acoplar fácilmente, usando unos pulpos o unas redes, encima del portabultos entre las alforjas traseras o las delanteras. Al ser impermeable y estanco, protege lo que tengas en el interior en uno de los puntos que más agua va a recibir en caso de lluvia, ya que no solo hay que tener en cuenta la que cae del cielo, sino también la que lanzan las ruedas al rodar sobre mojado. Es mucho más versátil ya que se puede emplear para muchas otras cosas además del cicloturismo. Por ejemplo, si en uno de tus viajes decides hacer una excursión, sin bici, por un río, puedes meter lo que necesites en el saco ya que suele venir con una correa para llevar al hombro o incluso las hay con correas para llevar como una mochila, en lugar de llevarte una alforja en la mano.

Maleta de bicicleta:

La maleta es otra opción para llevar el equipaje encima del portabultos trasero. Se trata de una bolsa que se coloca mediante anclajes. No están muy extendidas porque, en comparación con el saco estanco, son más caras, es más fácil romper los anclajes mientras que el saco no tiene, no son tan versátiles y suelen tener el peso más alto de manera que el punto de gravedad de la bicicleta sube y pierde estabilidad.

Caja o cesta:

Otra opción para poner encima del portabultos trasero o delantero. Si es para llevar equipaje puro y duro, es la peor opción, ya que normalmente el anclaje es más complicado y el interior está menos protegido. Tendrás que idear un sistema para que no se te moje todo cuando llueve. Sin embargo, es una buena opción que se usa para viajar con animales, como hace Bikecanine.

Remolque de bicicleta:

Si alguien va a usar un remolque de bicicleta es, generalmente, porque va a llevar una gran cantidad de equipaje o porque va a llevar niños, aunque también los hay que viajan solo con remolque y sin alforjas. Antes de seguir hay que decir que, en España, el transporte de personas en este tipo de remolques está prohibido en vías interurbanas, quedando en manos de cada ayuntamiento la normativa dentro de su municipio. Sin embargo, la ley es lo suficientemente abstracta como para que no tengas problemas en tramos segregados del tráfico como son, por ejemplo, las Vías Verdes. Los remolques tienen a favor que permiten liberar de carga la bici ya que no tiene que soportar el peso directamente. Además, según el remolque, el punto de gravedad es más bajo y, aunque no lo parezca, son muy estables. En contra, añades más peso total a lo que tienen que mover tus piernas así que tienes que estar fuerte para moverlos. Además, llevas más componentes que se pueden romper y, siendo un sistema no tan extendido, no siempre va a ser fácil arreglarlos.

Bikepacking:

El bikepacking es una modalidad bastante reciente que viene de América. Se trata de llevar un equipaje minimalista en bolsas que se anclan al propio cuerpo de la bici. Como punto bueno es que tienes menos componentes que cargar ya que, por ejemplo, no llevas portabultos. Eso sí, reduces bastante el espacio para transportar así que está más indicado para viajes cortos.

Por supuesto, todas estas formas de transportar las cosas se pueden compaginar y hay opciones muy interesantes, como mezclar las alforjas con las bolsas de bikepacking, o llevar un pequeño remolque con alforjas delanteras para repartir el peso. Al final, lo que cuenta es que vayáis a gusto y disfrutéis, porque eso es lo más importante a la hora de hacer un viaje en bicicleta.

Y vosotros, ¿cómo lleváis el equipaje en vuestras salidas cicloturistas?